Adictos al café

viernes, 25 de mayo de 2012

Quizá sea hora...

Quizá sea hora de irse yendo a la cama. Pero no puedo: estoy terminando de hacer algo. Además...¿qué haría yo ahora en la cama, si no dar vueltas como una peonza? Sería un sin sentido... Echarme en la cama, y simplemente mirar al techo, sin dormir. ¿Pa' qué? Ummm... Dormir. Hace meses que no lo hago como debería. Han habido semanas en las que si he dormido dos o tres horas diarias ha sido un lujazo. Otras...he dormido seis o siete horas, pero mi mente no descansaba: seguía trabajando a altas revoluciones. Y otras noches...bueno, otras noches simplemente sufro de insomnio y directamente, por mucho que muera de sueño, no duermo. A veces desearía poder dormir, y dormir, y dormir...infinitamente. Pero...desear eso sería como desear morir. Tampoco quiero eso. En tal caso lo desearía si no encontrase un sentido a esta vida. Y bueno, aunque a veces no la entienda creo que tengo un motivo, uno solo...para seguir adelante. Allá voy...


sleep, sleep darling, sleep.

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